Las pusimos a cocer en el horno y una vez secas las pintamos con témpera. Ya tenemos galletas espaciales de estrellas y nubes, una para cada uno...pero no nos las podemos comer. Ahora jugaremos con ellas una temporada para trabajar distintos conceptos como el número, muchas-pocas, lleno-vacío, etc... y luego nos las llevaremos a casita.
Mirad el resultado...Os gusta?
¡Qué buena pinta tienen esas galletas! ¡Qué pena que no se puedan comer! Os quedaron genial. Un b iquiño.
ResponderEliminarImagínate a los niños, hasta que les hemos hecho entender que no eran comestibles...y es que dan ganas de comerlas. Ahora juegan mucho con ellas. Un abrazo Ana
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